Cuando llegamos al Coto Escolar en primer lugar fuimos al
comedor. Allí nos dijeron cómo iban las cosas y luego nos repartieron en
grupos. Yo estaba en el A de ardillas.
La primera actividad que hizo nuestro grupo fue la
equitación: yo me monté en Tara que era la más alta, y acariciamos a los
caballos de competición. Luego hubo un recreo y allí jugamos a la comba, al
fútbol, baloncesto…
La segunda actividad eran las plantas medicinales: allí
hicimos sales de baño relajantes. Las hicimos con los siguientes ingredientes:
sal marina, espliego y melisa.
Luego fuimos a comer: de primero comimos macarrones con
carne picada ¡mejores que los de Italia!, de segundo filete de pollo empanado
con patatas fritas ¡umm buenísimo! Y de postre había manzanas, pero yo no las
comí.
La tercera actividad fue la búsqueda del tesoro ¡fue un
recorrido larguísimo! Pero al final encontramos el tesoro: ¡un caramelo para
cada uno!
Luego fuimos al chozo de los sentidos. La monitora nos
explicó que los chozos es donde los pastores se refugian cuando hay mal tiempo
o se pierden. También nos dijo que eran muy típicos por la zona del Bierzo.
Allí vimos crisálidas de gusanos de seda. En unas cajas teníamos que ver qué
había dentro t vimos huevos de Emú
Por último fuimos a ver los animales: vimos a un os pardo
¡era el más grande de España!, vimos a un Emú, la monitora nos dijo que el
macho siempre incubaba y que si lo hacía la hembra él la mataba a picotazos.
Luego corrimos contra el carnero, pero estaba muy vaguete. Y en último lugar
buscamos las diferencias entre el ciervo y su primo: que el ciervo tenía la
cola más corta y no se le caían los cuernos y a su primo sí.
Y después de ese día tan bueno, el tío de Jorge, que era el
que conducía el autobús, nos llevo a La Bañeza.
Beatriz Monedero Alonso 3ºB